Descansá la mente un ratito y llenate de ideas de bien, de palabras que traen esperanza, de pensamientos de paz.


jueves, 6 de diciembre de 2007

Hay un enemigo del hombre (entre tantos) que estaba cuando Jesús vino a la tierra y que sigue estando. Es un engañador y perverso asunto. cuando pretende acercar a la gente a Dios lo único que hace es alejarla. cuando ofrece libertad lo único que hace es encerrar a las personas. Estoy hablando de la religiosidad. Mucho se ha comentado acerca del tema, mucho se ha dicho, pero quisiera dar ahora mi humilde opinión. Jesús se enojó con los líderes religiosos de esos ´dias por varias razones ,entre ellas la hipocrecía, soberbia, y no dejar acercarse a Dios a los no judios, pero la peor de ellas era que mostraban una imagen de Dios totalmente erronea y distorsionada. Mostraban a un Dios severo, inpersonal, egoísta, en fín, todo lo contrario a quien Él realmente es. Estos hombres vivian una religión no una relación con Dios como lo hizo su padre Abraham y los grandes profetas. Estaban llenos de orgullo y auto justificación, alardeando de sus grandes obras mientras oprimian al pobre y le faltaban el respeto a Jehová. Jesús aborrecía su religiosidad. Él lo dió todo en la cruz para que el hombre pudiese ser reconciliado con Dios y tener una relación con Él. Encuentro que hoy (y no hablo de ninguna denominación en particular) la iglesia de Cristo ha caido en la misma trampa. La gente sigue a los hombres, siguen reglas pero poco saben acerca de Dios porque no lo conocen. Por lo que murió Jesús no lo tienen, siendo cristianos y creyendo en Él, no tienen una relación con Dios. Y esto es tan importante, es vital para vivir en este mundo que cada vez está más oscuro. Todos están tan envuletos en sus mundos y afanes que no le dan tiempo. De qué te sirve un posición en una iglesia, la plata, la fama, la aceptación y reconocimiento humano? Todo eso es polvo, temporario, una ilusión que pronto se va a terminar y lo único que va a quedar va a ser vos en frente del creador preguntandote, "Qué hiciste con lo que te dí? vos sabes, los dondes, la prosperidad, la salud, qué hiciste con todo eso, acaso lo compartiste, o viviste nada más para vos?" Cómo no se te parte el corazón y te llenás de temor al pensar que la mirada de Jesús cuando te encuentres con Él va a ser de decepción? La religiosidad mata. Es hueca, inservible. Dios quiere tanto que las personas lo conozcan como es. Sabías que Jesús reía? Sabías que se divertía y tenía amigos y contaba chistes y amaba y ama y todavía ríe y llora porque su pueblo le da la espalda? La religiosidad mata, hiere, pudre el corazón por una razón: nos volvemos orgullosos, autosuficientes y nos autojustificamos pensando que por hacer las cosas bien nos ganamos el cielo, o que Dios se maravilla y dice wow este si que lo logro, que buen cristiano. En otras palabras, el pensarnos justos o buenos invalida el sacrificio de Jesús porque le restamos significado como diciendo cualquiera lo pudo haber hecho, es como decirle, bueno gracias Jesús por tu sangre derramada y todo eso pero no era necesario yo mismo me podia salvar pero igual gracias por el intento...
Chocante, no? Dios aborrece la autojustificación. El orgullo nos aleja de Dios, y es el peor de los pecados porque pretendemos ser igulaes a Él, por qué cayó satanas?...
Me pone tan triste pensar que en la iglesia de Cristo esten pasando las mismas cosas que pasaban con los religiosos de su epoca. Me pone tan triste que la gente tenga una imagen distorsionada de Dios, pero no los juzgo porque yo estuve ahí. Si querés conocer a Dios pediseló, no le tengas miedo porque su amor es más grande que cualquier cosa que puedas decir o hacer. A veces tenemos estructuras en nuestra vida que nos han sido puestas por nuestras iglesias, familias, sociedad pero si estas dispuesto el Espíritu Santo las romperá solo tenés que pedirselo pero no te sorprendas cuando lo haga. Solía pensar que Dios se iba a enojar conmigo si tenía un mal pensamiento o si no hacía las cosas bien hasta que entendí la gracia de Dios y que Jesucristo es el único que justifica.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Esperando, esperanzada

Me recibí de Licenciada en Publicidad el lunes. Debería estar extremadamente feliz, pero hay algo muy adentro que por algna razón no está satisfecha. Pienso en la publicidad y me doy cuenta que no son los mismos sentimientos que tenía hacia ella los que tengo ahora. La vida te cambia mucho en cuatro años, y ahora qué? Conseguir un trabajo, tener una carrera exitosa? Casarse, tener hijos...porque hay una sensación de insatisfacción en mi alma? Porque muy adentro no es lo que quiero realmente, es decir, lo quiero pero no es mi meta ni lo que más deseo. Hay un toque de pesimismo en todo esto, juro que no estoy deprimida jaja, es solo una pequeña vocecita en mí que dice, pucha (si, pucha), esto es todo? Pero sé que este no es el fín, sino apenas el comienzo porque sé que alguien más grande me está diciendo, mis pensamientos no son tus pensamientos, confía em mí. Y ahí estoy confiando, pasando por el desierto más largo de mi vida con Dios, esperando, esperanzada, contando los minutos y las horas hasta que pase algo. Siempre pasa algo, es más, ni siquiera sé lo que estoy esperando, solo estoy acá y miro y no veo nada y me recorre un calor de angustia por la espalda porque lo único que me queda es confiar. Es tan dificil, aguardar lo que no se ve ni se conoce, supongo que eso es la fe, no? (molesta que solo ponga un signo de pregunta en vez de dos? a mi no)...es que a veces me canso, solo eso.
El otro día estaba leyendo el libro de Jeremías, pobre tipo, la verdad que te sentís mejor acerca de tu vida después de leerlo. Estuvo 40 años diciendole al pueblo de Israel que se convirtieran de sus maldades porque Dios iba a traer destrucción a Jerusalén y que iban a ser llevados a Babilonia en cautiverio, obviamente nadie le hizo caso y es lo que pasó por allá en el año 586 A.C. Después que ocurrió todo esto quedo una porción del pueblo bajo el mando de un general de Nabucodonozor (rey de Babilonia - que por cierto es la actual Irak). Entre ellos estaba Jeremías, y el pueblo por primera vez en casi medio siglo le pide que hable con Dios y le pregunte que deberían hacer ahora.Jeremías (creo yo sorprendido pero totalmente incrédulo a sus intenciones) pide dirección al Señor y le dice que el pueblo no vaya a Egipto porque allí perecerán a filo de espada, de pestes y de hambre. A ver, qué hizo el pueblo? Le dicen a Jere (seguro que asi le decian) que es mentira,que Dios no dijo eso! y Jere les contesta (más o menos así) Para que preguntan!? no me hubiesen preguntado no les iba a pasar nada en Egipto, pero ahora si por desobecer a Dios. A veces la gente es igual, le dicen Dios mío qué querés qué haga, e que te estoy fallando, quiero tu voluntad, y cuando Dios les contesta , responden: a no!, eso no es de Dios,porque no va acorde a sus propios planes y deseos de su corazón. El corazón imita la voz de Dios, y es tan fácil dejarse llevar por el.