Descansá la mente un ratito y llenate de ideas de bien, de palabras que traen esperanza, de pensamientos de paz.


sábado, 8 de diciembre de 2012

Hoy


Sé que es imposible, pero quiero poner en palabras lo que hiciste hoy en mí.

Termine en un lugar que no esperaba estar,

Y vi tu gloria

Tu majestad

Tu hermosura, tu santidad...

Y un llanto desde lo más profundo de mí clamaba, te quiero a vos, te quiero a vos.

Pregunté, ¿a dónde voy ahora? Y en mi espíritu sentí decirme que me abrias una puerta, que vos me abrias una puerta grande y aunque mi mente no puede comprender lo que mi espirtu siente, Dios no quiero perder esto que me diste hoy, por nada del mundo. Y quede llorande delante de tu hermosura, desahogando años de espera , derramando mi alma delante tuyo. Tu presencia se hizo tan fuerte que no podía levantarme, estaba tán deslumbrada con tu majestad que hasta rogué que me llevaras a casa porque se me hacía insoportable estar separada de esa gloria. Pero estás conmigo, y grandes cosas tenés que hacer conmigo todavía. Y aunque es más difícil decirlo estando ya fuera de esa gloria, te quiero a vos, te quiero a vos Jesús, sobretodas las cosas sólo te quiero a vos, Jesús.